Tampico, Tamaulipas. - El médico residente del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Fernando Jaziel López Pérez, que fue dado de baja de su empleo por supuesto delito de falta de probidad en el nosocomio donde laboraba, pidió una investigación independiente y sin vicios, refutando los dichos en su contra de los directivos del instituto con sede en Ciudad Madero. 

El galeno residente acusó directamente a la delegada del IMSS en Tamaulipas, Velia Patricia Silva Delfín; al director del Hospital General Regional número 6 de Ciudad Madero, Juan Ramírez Hernández; al jefe de Enseñanza, Ricardo Salas Flores, y a la jefa del Departamento de Urgencias, Nora Esther Cordero Paredes, de haberlo sometido a un juicio viciado y completamente irregular. 

Reveló que para limpiar su nombre está exigiendo que el IMSS a nivel central, junto con la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Tamaulipas (CODHET), indague el "juicio sumario de que fue objeto", luego que el pasado lunes 15 de junio presentó una queja ante Derechos Humanos para que se investigue a fondo este caso.

"Estoy pidiendo que el Instituto Mexicano del Seguro Social a nivel central reconsidere la resolución que de manera completamente irregular tomó la Delegación Tamaulipas del organismo", precisó. 

En su explicación, dijo que el video que le pidió una empresa de Altamira para sustentar las necesidades de ventiladores en el nosocomio lo grabó el día 10 de mayo, después, el día 15 de mayo fue difundido en cadena nacional, desconociendo quién lo hizo llegar al medio.

Por tanto, el 27 de mayo de 2020 compareció ante el Departamento Jurídico del IMSS en Ciudad Madero al cargo de David Alberto García Pérez, quien le notificó la rescisión del contrato, por lo que considera que fue cesado de forma arbitraria, incluso valora que fue despedido hasta por consigna, "porque hubo faltas graves al debido proceso". 

López Pérez recordó que llevó una declaración por escrito para quitar todas las imputaciones que "de forma irregular y con faltas a la verdad el IMSS había difundido para poder rescindirle el contrato de manera irregular e inconsistente por falta de pruebas”.

Expuso que fue el día 7 de junio cuando fue despedido del empleo que tenía como médico residente en el área Covid-19, donde estaba como voluntario, fecha en la que un subdirector del nosocomio, con un notario público, le informó sobre la rescisión de contrato que según era "por falta de probidad y honradez", lo que niega.

Ahora bien, advirtió que en todo este caso que está provocando una polémica nacional no es el único involucrado, existiendo oficios membretados del nosocomio que previamente habían sido elaborados para solicitar contribuciones privadas, estando firmados por los mismos directivos del Hospital General Regional número 6 de Ciudad Madero, que ahora lo acusan falsamente. 

Por último, el médico residente insistió que no hubo una investigación correcta, porque sólo a él se le involucró, igualmente refutó que el IMSS cuente con todos los aditamentos y equipos que dice tener, porque de otro modo cómo se explica que en ese momento tres médicos residentes se hayan encontrado ofreciendo a tres distintos pacientes asistencia ventilatoria manual por más de ocho horas, y que pese a que el IMSS calificó como "invasión a la privacidad" que se haya difundido el video en referencia, tajantemente lo negó, además de acusarlo "de poner en peligro la vida de la paciente", cuando esto jamás ocurrió. 

oal